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Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
2 participantes
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Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Las clases por fin habían terminado ese día, pero Angelique no había termiando el trabajo de herbología que había dejado la profesora. tenía que catalogar algunas plantas que habían visto ese día en la clase, según temperatura, ambiente y lugar de nacimiento. Suspiró mientras guardaba todo en su mochila sin ningún ánimo de ir a la Biblioteca para comenzar con su tarea, solo quería divertirse, reir un rato sin pensar en lo absoluto en ese tema, que aunque era muy interesante no lo parecía en aquel momento.
Se despidió de sus amigas las cuales estaban planeando una tarde junto al Lago Negro. Ese día esos planes no le apetecían. Tenían pinta de hacer alguna travesura y aunque era una chica de solo diversión y fiestas no le apetecía mucho meterse en algún problema por lo que opto mejor por ir a la Sala Común de su casa, sentarse un rato en el sofá junto a la chimenea y leer un rato sobre alguna criatura mitológica mientras se le ocurría algún plan que de verdad le llamara bastante la atención.
En su camino hacia su destino, decidió pasar por la cocina, entraría sin que nadie la viera y dejaría que los elfos llenarán su mochila con deliciosas reservas para la tarde, un poco de jugo de uva, hidromiel, pastel de calabaza y muchos chocolates. Uhmmm chocolates. Recordó que a Richard le gustaban mucho y sonrió. Algo tenía ese chico que aveces la hacía, como decirlo... Levitar.
Agradeció a los elfos y se encamino a la sala común, tocó el barril correcto y entró. Su mirada se dirigió rápidamente al chico que se encontraba en el medio de la sala. Un chico de cabello oscuro y sonrisa encantadora. Sonrió y se acercó a el sin dudarlo.
•Hola Ric, Otra vez con tu escoba? Creo que ya se que regalarte para navidad•
Sonrió y se sentó a su lado. El chico se encontraba limpiando su escoba, algo que Angelique lo veía hacer muy a menudo.
Se despidió de sus amigas las cuales estaban planeando una tarde junto al Lago Negro. Ese día esos planes no le apetecían. Tenían pinta de hacer alguna travesura y aunque era una chica de solo diversión y fiestas no le apetecía mucho meterse en algún problema por lo que opto mejor por ir a la Sala Común de su casa, sentarse un rato en el sofá junto a la chimenea y leer un rato sobre alguna criatura mitológica mientras se le ocurría algún plan que de verdad le llamara bastante la atención.
En su camino hacia su destino, decidió pasar por la cocina, entraría sin que nadie la viera y dejaría que los elfos llenarán su mochila con deliciosas reservas para la tarde, un poco de jugo de uva, hidromiel, pastel de calabaza y muchos chocolates. Uhmmm chocolates. Recordó que a Richard le gustaban mucho y sonrió. Algo tenía ese chico que aveces la hacía, como decirlo... Levitar.
Agradeció a los elfos y se encamino a la sala común, tocó el barril correcto y entró. Su mirada se dirigió rápidamente al chico que se encontraba en el medio de la sala. Un chico de cabello oscuro y sonrisa encantadora. Sonrió y se acercó a el sin dudarlo.
•Hola Ric, Otra vez con tu escoba? Creo que ya se que regalarte para navidad•
Sonrió y se sentó a su lado. El chico se encontraba limpiando su escoba, algo que Angelique lo veía hacer muy a menudo.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
En ese momento su mente se trataba de arreglar su escoba, algunas de las ramas se habían salido de su usual forma y eso sin duda podría perjudicarle en su próximo partido de Quidditch. Su escoba era entre sus posesiones mas apreciadas y cuidadas del mundo, tal vez detrás de ella su apreciado cuaderno con sus apuntes de datos que ha recogido con los años sobre sus preciados dragones...pero aquello era una obra de puro amor y admiración hacía aquellos animales.
Sus guantes yacían en la mesa cercana, ya que no faltaba mucho para que terminara de pulir el mango de su preciada Nimbus. Aunque tal vez sus ojos se levantaron para notar quien recién entraba a la sala común. Angelique, la única chica que le hacía actuar como un idiota. Era mas que obvio que el sentía algo mas que amistad, pero prefería hacer como si nada pasara y continuar (con el mismo movimiento monótono) reparando su escoba.
-Angie. No te preocupes por eso, a este paso mi escoba durará por siglos - Bromeó ligeramente, no evitando soltar una sonrisa coqueta pero sincera hacía su comentario- ¿Que haz hecho? No me digas que andas merodeando el castillo como si nada- Si algo que no podía evitar, era ponerse algo receloso o protector con ella...A veces se le salía ese tipo de comentarios como si nada.
Tomó su vaso con jugo de calabaza, uno que tomó de la cocina antes de empezar con su trabajo. Y se regañó, por no haber traído nada de comer ya que se estaba muriendo por algo.
Sus guantes yacían en la mesa cercana, ya que no faltaba mucho para que terminara de pulir el mango de su preciada Nimbus. Aunque tal vez sus ojos se levantaron para notar quien recién entraba a la sala común. Angelique, la única chica que le hacía actuar como un idiota. Era mas que obvio que el sentía algo mas que amistad, pero prefería hacer como si nada pasara y continuar (con el mismo movimiento monótono) reparando su escoba.
-Angie. No te preocupes por eso, a este paso mi escoba durará por siglos - Bromeó ligeramente, no evitando soltar una sonrisa coqueta pero sincera hacía su comentario- ¿Que haz hecho? No me digas que andas merodeando el castillo como si nada- Si algo que no podía evitar, era ponerse algo receloso o protector con ella...A veces se le salía ese tipo de comentarios como si nada.
Tomó su vaso con jugo de calabaza, uno que tomó de la cocina antes de empezar con su trabajo. Y se regañó, por no haber traído nada de comer ya que se estaba muriendo por algo.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Trató de no sonar nerviosa, que su voz no sonara entrecortada ni mucho menos permitiría que se le subieran los colores. Pero no podía evitarlo del todo, su hermoso rostro, sus bellos ojos y su sonrisa perfecta habían logrado que suspirara más de una vez en clase.
Sacó todo lo que había cogido de la cocina y lo puso encima de la mesilla que se encontraba en el centro. Dejó su mochila en el sofá y se sentó en el suelo, a la altura de las rodillas de Ric, apoyo su cabeza en el borde del sofá y habló con voz serena.
•Quieres comer algo? Me pasé por la cocina antes de venir por si me daba hambre•
Levantó su rostro para encontrarse con esa hermosa mirada y sacó un chocolate de su bolsillo, sonrió de lado y volvió a hablar •O tal vez prefieres uno de estos• Levantó un poco su mano enseñándolo, al mismo tiempo que le quitaba el envoltorio y le daba un leve mordisco. Volvió a suspirar imaginándose ese delicioso manjar en los labios de su acompañante y el delicioso sabor que tendrían.
Escuchó su comentario y nuevamente el rubor apareció en su rostro, le gustaba mucho saber que Ric se preocupaba por ella, o bueno eso parecía. Sonrió pensando en la situación, que pasaría si el la viera junto a otro chico, y no era que lo deseara, por que a decir verdad no había ningún chico que le llamará la atención que no fuera él, pero era algo que no podía sacar de su cabeza.
•La verdad es que no, por eso preferí venir a la sala común, no me apetece hacer alguna ronda en busca de problemas• Dijo casi en susurros.
Sacó todo lo que había cogido de la cocina y lo puso encima de la mesilla que se encontraba en el centro. Dejó su mochila en el sofá y se sentó en el suelo, a la altura de las rodillas de Ric, apoyo su cabeza en el borde del sofá y habló con voz serena.
•Quieres comer algo? Me pasé por la cocina antes de venir por si me daba hambre•
Levantó su rostro para encontrarse con esa hermosa mirada y sacó un chocolate de su bolsillo, sonrió de lado y volvió a hablar •O tal vez prefieres uno de estos• Levantó un poco su mano enseñándolo, al mismo tiempo que le quitaba el envoltorio y le daba un leve mordisco. Volvió a suspirar imaginándose ese delicioso manjar en los labios de su acompañante y el delicioso sabor que tendrían.
Escuchó su comentario y nuevamente el rubor apareció en su rostro, le gustaba mucho saber que Ric se preocupaba por ella, o bueno eso parecía. Sonrió pensando en la situación, que pasaría si el la viera junto a otro chico, y no era que lo deseara, por que a decir verdad no había ningún chico que le llamará la atención que no fuera él, pero era algo que no podía sacar de su cabeza.
•La verdad es que no, por eso preferí venir a la sala común, no me apetece hacer alguna ronda en busca de problemas• Dijo casi en susurros.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Era mas que obvio que trataba inhumanamente de verse calmado y como le simple hecho que la rubia se encontrara cerca de el no le afectara en un mínimo. Buscó su paño para empezar a pulir el mango pero se quedó mirando como sacaba comida tras comida de su bolso. Como siempre, como si leyera la mente y por eso no evitó morderse el labio inferior con algo de culpa (y también tratando de no decir alguna cosa fuera de lugar.)
-¿Lees mi mente o qué? Que yo sepa no tomas Adivinación, ¿o si?- Exageró, claro que el sabía todas las clases que la chica tomaba. Eran muy buenos amigos, y tal vez fue eso lo que hizo que cambiara todo de parecer. No pudo evitar acariciarle las hebras de cabello mas cercanas a sus piernas, con bastante cariño- No pude comer bien, haciendo la tarea de Herbología. No quiero que me pongan una nota baja nuevamente.
Pero tal vez su mirada terminó en las manos de la chica cuando el chocolate apareció, era tan injusto...era su favorito. El que tenía crema de avellanas adentro. No evitó quitarle el chocolate para comérselo el, tal vez mientras le miraba fijamente a sus ojos con una leve sonrisa- ¿Quieres ahora?- Era bastante subjetivo, querer compartir algo que ya el había dado un mordisco a la chica que le volvía loco.
Le dio tranquilidad, saber que hasta ahora no estaba en problemas, volviendo a acariciar su cabello mientras ahora volvía a beber de su vaso- Ya...Creí que hoy íbamos a tener práctica pero se canceló...Y se les olvidó decirme, pero al menos pude repararla antes de que quién sabe, trate de ser mala conmigo.
-¿Lees mi mente o qué? Que yo sepa no tomas Adivinación, ¿o si?- Exageró, claro que el sabía todas las clases que la chica tomaba. Eran muy buenos amigos, y tal vez fue eso lo que hizo que cambiara todo de parecer. No pudo evitar acariciarle las hebras de cabello mas cercanas a sus piernas, con bastante cariño- No pude comer bien, haciendo la tarea de Herbología. No quiero que me pongan una nota baja nuevamente.
Pero tal vez su mirada terminó en las manos de la chica cuando el chocolate apareció, era tan injusto...era su favorito. El que tenía crema de avellanas adentro. No evitó quitarle el chocolate para comérselo el, tal vez mientras le miraba fijamente a sus ojos con una leve sonrisa- ¿Quieres ahora?- Era bastante subjetivo, querer compartir algo que ya el había dado un mordisco a la chica que le volvía loco.
Le dio tranquilidad, saber que hasta ahora no estaba en problemas, volviendo a acariciar su cabello mientras ahora volvía a beber de su vaso- Ya...Creí que hoy íbamos a tener práctica pero se canceló...Y se les olvidó decirme, pero al menos pude repararla antes de que quién sabe, trate de ser mala conmigo.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Hizo una mueca al escucharlo, no sabía si estaba bromeando o si lo decía enserio. La verdad es que no había ninguna razón por la que el pudiera saber todas las clases en las que asistía Angelique, pero de alguna manera esperaba que así fuera, que se interesara un poco en ella... Más de lo normal. •Si tomará clases de adivinación podría saber donde te metes cada vez que te desapareces• terminó la última palabra y quiso que se la tragara la tierra, no podía creer que lo dijera en voz alta, en frente de él.
Hizo una mueca y volvió a hablar, esta vez con la voz temblorosa y con un rojo en sus mejillas, que si el pudiera verla (y esperaba que no fuera así) la delataría en ese instante •Pensé que quizá podría darme hambre más tarde...•
Al parecer no era la única que se había liado con la tarea de Herbología, y es que aunque era fácil era tediosa de hacer. Muchas plantas, muchas categorías. De sólo pensar en eso me provocaba una terrible jaqueca •Quizás... Si quieres.. Podríamos hacer esa tarea juntos. Digo no ahora... Pero• Suspiró y volvió a hablar •Bueno tu me entiendes• Como era posible que un chico la pudiera poner tan nerviosa con lo hacía Richard. Aún no lograba entenderlo.
•Debiste preguntar antes de comértelo, no crees?• Dijo con un tono serio al mismo tiempo que sin pensarlo estaba mordiendo su labio inferior. El chocolate estaba delicioso pero quería pensar que en sus labios lo era aun más.
Agarró unas uvas y comenzó a jugar con ellas mientras disfrutaba las caricias que le daba. Sus manos eran tan suaves, tan cálidas. Su comentario la saco de sus pensamientos por lo que agradecía que hubiera cambiado un poco el tema. •Contra quien será el próximo partido?•
Siendo sincera, Angelique solo iba a los partidos por el Guardián de Hufflepuff.
Hizo una mueca y volvió a hablar, esta vez con la voz temblorosa y con un rojo en sus mejillas, que si el pudiera verla (y esperaba que no fuera así) la delataría en ese instante •Pensé que quizá podría darme hambre más tarde...•
Al parecer no era la única que se había liado con la tarea de Herbología, y es que aunque era fácil era tediosa de hacer. Muchas plantas, muchas categorías. De sólo pensar en eso me provocaba una terrible jaqueca •Quizás... Si quieres.. Podríamos hacer esa tarea juntos. Digo no ahora... Pero• Suspiró y volvió a hablar •Bueno tu me entiendes• Como era posible que un chico la pudiera poner tan nerviosa con lo hacía Richard. Aún no lograba entenderlo.
•Debiste preguntar antes de comértelo, no crees?• Dijo con un tono serio al mismo tiempo que sin pensarlo estaba mordiendo su labio inferior. El chocolate estaba delicioso pero quería pensar que en sus labios lo era aun más.
Agarró unas uvas y comenzó a jugar con ellas mientras disfrutaba las caricias que le daba. Sus manos eran tan suaves, tan cálidas. Su comentario la saco de sus pensamientos por lo que agradecía que hubiera cambiado un poco el tema. •Contra quien será el próximo partido?•
Siendo sincera, Angelique solo iba a los partidos por el Guardián de Hufflepuff.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Estaba al menos 80% seguro de las clases que ella tomaba, no era porque le acosaba sino porque la conocía bastante bien y podía asegurar cuales había escogido por certeza. Sin contar de que no solo contaba de las miles de veces que le hablaba de tener alguna tarea o tener que correr hacía el salón de clases ya que llegaría tarde. Las de el eran sencillas: Cuidado de las Criaturas Mágicas (wow, gran revelación) mas Runas Antiguas- Si quieres saber donde estoy, solo pregúntamelo- Se sintió un descarado, mientras le guiñaba el ojo y estaba seguro que si no sentía el mismo nivel de adrenalina que en un partido, se desmayaría del coraje.
Solo río, levemente mientras le regalaba una sonrisa...una bastante íntima y que prácticamente se las daba solo a ella- Por eso te lo agradezco- Por un momento se imaginó lo siguiente: Ellos siendo pareja y tal vez el besándole en los labios agradecido. Era bueno soñar, tal vez...Pero era algo que totalmente deseaba. Pero ignoró su comentario sobre su chocolate favorito, igual se lo dio antes de que se derritiera sobre sus dedos- Compartir es signo de confianza, cariño y demás...Te lo has ganado Angie- Se limpió el residuo usando sus labios, ya luego se ocuparía de lavarse bien las manos.
-Podemos hacerla ahora...Tengo parte hecha, a poco que caigo dormido en la Biblioteca- Exageró, pero si le ayudaba a compartir mas tiempo con ella, todo valdría la pena-Tenemos partido contra Slytherin...Tenemos que entrenar mas de lo normal, si es que queremos tener un buen juego con Gryffindor luego...¿Me esperas? Dejaré mis cosas en mi cuarto y así busco mis apuntes.
Se notaba que su mundo literalmente era la rubia y nadie más...Tal vez su sobrina en segundo lugar, pero Angelique siempre sería la excepción a todo.
Solo río, levemente mientras le regalaba una sonrisa...una bastante íntima y que prácticamente se las daba solo a ella- Por eso te lo agradezco- Por un momento se imaginó lo siguiente: Ellos siendo pareja y tal vez el besándole en los labios agradecido. Era bueno soñar, tal vez...Pero era algo que totalmente deseaba. Pero ignoró su comentario sobre su chocolate favorito, igual se lo dio antes de que se derritiera sobre sus dedos- Compartir es signo de confianza, cariño y demás...Te lo has ganado Angie- Se limpió el residuo usando sus labios, ya luego se ocuparía de lavarse bien las manos.
-Podemos hacerla ahora...Tengo parte hecha, a poco que caigo dormido en la Biblioteca- Exageró, pero si le ayudaba a compartir mas tiempo con ella, todo valdría la pena-Tenemos partido contra Slytherin...Tenemos que entrenar mas de lo normal, si es que queremos tener un buen juego con Gryffindor luego...¿Me esperas? Dejaré mis cosas en mi cuarto y así busco mis apuntes.
Se notaba que su mundo literalmente era la rubia y nadie más...Tal vez su sobrina en segundo lugar, pero Angelique siempre sería la excepción a todo.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
No pudo evitar sorprenderse al escuchar su respuesta. En definitiva lo último que podría esperar un "Si quieres saber donde estoy, solo pregúntamelo". Si bien Ric era su mejor amigo eso no la hacía su "dueña" para controlar cada lugar en el que él se pudiera encontrar. Suspiró pensando en la idea de ser más allá que amigos, era algo con lo que había soñado hacía unos cuantos años, pero que siempre había mantenido oculto. Aunque le confiaba muchas de sus cosas esta era una de las que en lo posible trataba siempre de ocultar.
•Ni que fuera tu novia para pedirte cuentas de que haces o dejas de hacer• Dijo casi en susurros pero sabía que no lo había dicho tan bajo, por lo que era más que probable que el la hubiera escuchado. Levantó una vez más su rostro y se encontró con su sonrisa, esa que la volvía loca, que la hacía temblar y que la dejaba atontada cada vez que lo hacía. •No... No tienes porque agradecer• Recibió el chocolate con una sonrisa mientras imaginaba ser ella la que quitaba el resto de chocolate de sus dedos y la envidia que sentía de ese chocolate. No podía sacar de su pensamiento esas ideas, esos deseos. Pero sabia que era solo eso, un deseo, un sueño. Probablemente Richard sentía algo por alguna chica y solo la veía como su amiga, nada más.
•Claro.. No tengo problema con hacerla ahora• Lo último que quería hacer en ese momento era hacer sus deberes, pero si eso implicaba tenerlo a su lado toda la tarde no desaprovecharía la ocasión. Por lo que agarró su mochila y comenzó a sacar el pergamino, la tinta, su pluma y dos libros de herbolaría que había sacado en momentos anteriores de la Biblioteca.
•Aquí te espero• Angelique lo vio alejarse del lugar, hasta su andar era perfecto. No hacía más que suspirar como una tonta. Y lo que más lamentaba era que sería su último año juntos, se verían después de salir, si, pero no sería lo mismo. Verlo todos los días, encontrarse en las noches en la sala común y sentarse junto a la chimenea.
Angie negó con la cabeza mientras sus ojos comenzaban a aguarse •Si tan solo pudiera decirte que estoy enamorada de ti• Volvió a susurrar aun con la cabeza agachada sobre el libro de herbología, por lo que no había notado que no estaba sola en aquella sala.
•Ni que fuera tu novia para pedirte cuentas de que haces o dejas de hacer• Dijo casi en susurros pero sabía que no lo había dicho tan bajo, por lo que era más que probable que el la hubiera escuchado. Levantó una vez más su rostro y se encontró con su sonrisa, esa que la volvía loca, que la hacía temblar y que la dejaba atontada cada vez que lo hacía. •No... No tienes porque agradecer• Recibió el chocolate con una sonrisa mientras imaginaba ser ella la que quitaba el resto de chocolate de sus dedos y la envidia que sentía de ese chocolate. No podía sacar de su pensamiento esas ideas, esos deseos. Pero sabia que era solo eso, un deseo, un sueño. Probablemente Richard sentía algo por alguna chica y solo la veía como su amiga, nada más.
•Claro.. No tengo problema con hacerla ahora• Lo último que quería hacer en ese momento era hacer sus deberes, pero si eso implicaba tenerlo a su lado toda la tarde no desaprovecharía la ocasión. Por lo que agarró su mochila y comenzó a sacar el pergamino, la tinta, su pluma y dos libros de herbolaría que había sacado en momentos anteriores de la Biblioteca.
•Aquí te espero• Angelique lo vio alejarse del lugar, hasta su andar era perfecto. No hacía más que suspirar como una tonta. Y lo que más lamentaba era que sería su último año juntos, se verían después de salir, si, pero no sería lo mismo. Verlo todos los días, encontrarse en las noches en la sala común y sentarse junto a la chimenea.
Angie negó con la cabeza mientras sus ojos comenzaban a aguarse •Si tan solo pudiera decirte que estoy enamorada de ti• Volvió a susurrar aun con la cabeza agachada sobre el libro de herbología, por lo que no había notado que no estaba sola en aquella sala.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Era muy descarado de el, darle aquella respuesta pero muy adentro de el era entre las cosas que deseaba. No el hecho que la rubia fuera su stalker personal, sino que a la final de todo ella siempre supiera sus andanzas sin tener que pensar en ella era algo mas que una amiga. Sonaba algo patético, deseando con toda su vida que tal vez alguno de los dos avanzara, pero el miedo de perderla por un malentendimiento era mayor que nada. Tenía que admitirlo, su corazón se rompía en pedazos cada vez que pensaba en los posibles escenarios de rechazo total.
Por un momento se emocionó, tal vez sus oídos estaban escuchando lo que mas deseaba pero su rostro se sombrió un poco. Claro, la triste realidad de que ella no lo era- Angelique, lo dijo porque sabes que a veces me puedo perder y soy algo distraído- Trató de no pensar en la posibilidad del rechazo, la estaba pasando increíble y lo menos que quería era preocuparla por sus tonterías- Si tengo, te tengo que agradecer muchas cosas- Era terrible ser un adolescente, saber (o creer) que estas incomprendido en la vida. Se sentía demasiado cruel fingir algo de demencia, demencia que tenía con solo verla cerca.
Le sonrió una vez mas, tomando todo como si malabares fueran para prepararse a correr a su habitación-No tardo- Le comentó cuando empezó a recorrer los pasillos hacía su recamara, afortunadamente ninguno de sus compañeros de cuarto estaban. Pudo soltar un grito de pánico puro, de alegría mientras guardaba lo mejor que podía con el apuro que tenía y se cambiaba a una camisa más cómoda, una que mostraba mejor su figura (claro, ese tipo de cosas solo lo hacía cuando estaba con ella.)
"Bien Richard, tu puedes...Conquistala, poco a poco...Es tu último año, no puedes perderla por tu cobardía" Se hizo un monólogo intenso, ya con su bolso en mano que llevaba todo lo que necesitaba, volviendo con un andar tembloroso para sacar sus útiles cuando se sentó en la silla nuevamente.
Por un momento se emocionó, tal vez sus oídos estaban escuchando lo que mas deseaba pero su rostro se sombrió un poco. Claro, la triste realidad de que ella no lo era- Angelique, lo dijo porque sabes que a veces me puedo perder y soy algo distraído- Trató de no pensar en la posibilidad del rechazo, la estaba pasando increíble y lo menos que quería era preocuparla por sus tonterías- Si tengo, te tengo que agradecer muchas cosas- Era terrible ser un adolescente, saber (o creer) que estas incomprendido en la vida. Se sentía demasiado cruel fingir algo de demencia, demencia que tenía con solo verla cerca.
Le sonrió una vez mas, tomando todo como si malabares fueran para prepararse a correr a su habitación-No tardo- Le comentó cuando empezó a recorrer los pasillos hacía su recamara, afortunadamente ninguno de sus compañeros de cuarto estaban. Pudo soltar un grito de pánico puro, de alegría mientras guardaba lo mejor que podía con el apuro que tenía y se cambiaba a una camisa más cómoda, una que mostraba mejor su figura (claro, ese tipo de cosas solo lo hacía cuando estaba con ella.)
"Bien Richard, tu puedes...Conquistala, poco a poco...Es tu último año, no puedes perderla por tu cobardía" Se hizo un monólogo intenso, ya con su bolso en mano que llevaba todo lo que necesitaba, volviendo con un andar tembloroso para sacar sus útiles cuando se sentó en la silla nuevamente.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Levantó su rostro al escuchar unos pasos a su lado, miró de reojo y se encontro a Richard sentado en el sofá, se había cambiado el uniforme y se había dejado una camisa bien ajustada, de esas en las que siempre le marcaba su hermoso y perfecto cuerpo. Limpió sus ojos para que no notará que había estado a punto de llorar, lo último que necesitaba era que se pusieran hablar de sus sentimientos y terminara confesando todo lo que llevaba guardado.
Se incorporó por completo, agarró el pergamino en donde tenía apuntado todo el trabajo que tenían que hacer y se sentó a su lado, no quería hacer el trabajo, de hecho odiaba la idea de hacerlo pero era algo que simplemente haría por que el se lo pidió y por que los dejaría toda la tarde juntos, o eso esperaba.. No quería intromisión de ningún alumno de primero que eran los que no tenían nada que hacer si no molestar en la sala común.
•Bueno, el trabajo es algo extenso. Alguna flor o planta en especial con la que quieras comenzar?•
Preguntó casi sin ánimos, se notaba en su tono de voz. Suspiró y volvió a mirar su rostro. Sus ojos brillantes la estaban observando fijamente, Angelique quiso adivinar que estaba pensando, no le gustaba nada cuando el permanecía en silencio por bastante tiempo, hacía que su mente comenzará a crear muchas historias y nunca terminaban bien. Dejó a un lado el pergamino que tenía en sus piernas y sin pensarlo dos veces agarró una de sus manos aún con su mirada fija en sus ojos. Tomó impulso y volvió a hablar. Esta vez con una voz suave, cálida, como la que ponía siempre que le confiaba lo que le estaba pasando.
•Esta todo bien Ric?. Te noto algo.... Distraído•
Aferró mas su mano a la de él, le gustaba estar cerca de Richard, se sentía protegida.. querida. No de la forma que ella quería pero si de la manera, de la cual estaba segura, siempre lo iba a tener con ella.
Se incorporó por completo, agarró el pergamino en donde tenía apuntado todo el trabajo que tenían que hacer y se sentó a su lado, no quería hacer el trabajo, de hecho odiaba la idea de hacerlo pero era algo que simplemente haría por que el se lo pidió y por que los dejaría toda la tarde juntos, o eso esperaba.. No quería intromisión de ningún alumno de primero que eran los que no tenían nada que hacer si no molestar en la sala común.
•Bueno, el trabajo es algo extenso. Alguna flor o planta en especial con la que quieras comenzar?•
Preguntó casi sin ánimos, se notaba en su tono de voz. Suspiró y volvió a mirar su rostro. Sus ojos brillantes la estaban observando fijamente, Angelique quiso adivinar que estaba pensando, no le gustaba nada cuando el permanecía en silencio por bastante tiempo, hacía que su mente comenzará a crear muchas historias y nunca terminaban bien. Dejó a un lado el pergamino que tenía en sus piernas y sin pensarlo dos veces agarró una de sus manos aún con su mirada fija en sus ojos. Tomó impulso y volvió a hablar. Esta vez con una voz suave, cálida, como la que ponía siempre que le confiaba lo que le estaba pasando.
•Esta todo bien Ric?. Te noto algo.... Distraído•
Aferró mas su mano a la de él, le gustaba estar cerca de Richard, se sentía protegida.. querida. No de la forma que ella quería pero si de la manera, de la cual estaba segura, siempre lo iba a tener con ella.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Le preocupó por un segundo como encontró a la chica, creyó que de la nada estaba llorando y por eso se cuidó en sentarse despacio esperando su reacción. Vio que sus ojos estaban idos, y prefirió arriesgarse a algo que solo ha hecho cuando veía a la rubia dormir o en la sala común o en clases...le besó la coronilla de su cabeza. Por un momento lo hizo como acto de querer mostrarle que fuera lo que fuera, iba a estar con el...Pero no podía mentirse a si mismo, lo hizo porque era entre las pocas cosas que podía hacer sin que fueran tan obvio. Le sonrió, buscando al menos lo que tenía ya seleccionado.
-No sé, yo empecé con las flores...Tengo todas las comunes pero sé que me faltan demasiadas- Por un momento le pidió ayuda con sus ojos, ella era la experta en herbología, no el. Pero por un momento se le quedó viendo, esperando que le dijera fuera lo que la estuviera calcomiendo adentro. El quería ayudarla, tal vez con un abrazo (o mas bien robándole un beso) pero, se odiaba que tenía una imagen que presentar al público. Todos sabían que ella era su mejor amiga, y el podía hacer lo que se le daba la gana (relativamente).
Se mordió el labio, sabía que el era un libro abierto cuando se trataba de ella. Bajó la mirada, también su pluma para pensar que decirle. "¿Estoy loco por ti pero no puedo decírtelo? Porque sé que vas a dejarme de hablar, y quedaré devastado si por un segundo pierdo tu amistad" pero prefirió sonreírle, no tan abierta como siempre...pero era una buena sonrisa- Yo estoy bien, solo preocupado por ti. ¿Tu estás bien?- Acarició levemente su mano con su pulgar, para que viera que nada malo le pasaba. Porque se estaba muriendo internamente.
Que horror era ser un cobarde cuando de la chica que te gustaba se trataba.
-No sé, yo empecé con las flores...Tengo todas las comunes pero sé que me faltan demasiadas- Por un momento le pidió ayuda con sus ojos, ella era la experta en herbología, no el. Pero por un momento se le quedó viendo, esperando que le dijera fuera lo que la estuviera calcomiendo adentro. El quería ayudarla, tal vez con un abrazo (o mas bien robándole un beso) pero, se odiaba que tenía una imagen que presentar al público. Todos sabían que ella era su mejor amiga, y el podía hacer lo que se le daba la gana (relativamente).
Se mordió el labio, sabía que el era un libro abierto cuando se trataba de ella. Bajó la mirada, también su pluma para pensar que decirle. "¿Estoy loco por ti pero no puedo decírtelo? Porque sé que vas a dejarme de hablar, y quedaré devastado si por un segundo pierdo tu amistad" pero prefirió sonreírle, no tan abierta como siempre...pero era una buena sonrisa- Yo estoy bien, solo preocupado por ti. ¿Tu estás bien?- Acarició levemente su mano con su pulgar, para que viera que nada malo le pasaba. Porque se estaba muriendo internamente.
Que horror era ser un cobarde cuando de la chica que te gustaba se trataba.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Richard parecia tener la mente en cualquier otro lugar menos allí en donde estaban y eso era lo que le preocupaba a Angelique, no sabía si había logrado escucharla, si había visto sus ojos llorosos, eso era lo que menos necesitaba en esos momentos.
Intentó concentrarse en los deberes que tenían pendientes, quizás con la mente en eso dejaría de pensar en todo lo que sentía por su mejor amigo, tomó aire y volvió a mirar su pergamino en donde tenía unos puntos ya resueltos. •Yo seleccioné todas las plantas y flores con su lugar de nacimiento de cada una• para Angelique esta clase en particular era en la que mejor se desempeñaba y esto no era un secreto para nadie, no es que tuviera preferencia la profesora si no que desde muy pequeña siempre le había interesado esta área.
Angelique no pudo evitar sonreir al ver como le ponía ojitos de perrito casi rogandole por un poco de ayuda con los deberes, y aunque no le pusiera esos ojos Angie nunca se negaría en ayudar a un amigo y menos si se tratase de Richard, casi que lo tenía en un pedestal y dudaba que pudiera bajarlo de allí. •Si quieres puedes copiar lo que llevo hecho, no tengo inconveniente con que lo hagas• sonrió de lado al ver como su rostro se tornaba más tranquilo y relajado ante la respuesta de la chica.
Con su respuesta, Angie estaba más que segura que había notado el rojo de sus ojos y las pocas gotas de agua que quedaron en ellos cuando Ric había llegado de su habitación. Se acercó más a el y se refugió en sus brazos. Si bien sabia que con esto se delataría por completo, pero esta vez lo único que haría sería omitir los detalles importantes. •No te preocupes, estoy bien. Solo estoy algo nostalgica por ser nuestro ultimo año• claro que estaba nostalgica y si era su ultimo año pero esto tenia un trasfondo.
•sabes que te quiero... cierto?•
Intentó concentrarse en los deberes que tenían pendientes, quizás con la mente en eso dejaría de pensar en todo lo que sentía por su mejor amigo, tomó aire y volvió a mirar su pergamino en donde tenía unos puntos ya resueltos. •Yo seleccioné todas las plantas y flores con su lugar de nacimiento de cada una• para Angelique esta clase en particular era en la que mejor se desempeñaba y esto no era un secreto para nadie, no es que tuviera preferencia la profesora si no que desde muy pequeña siempre le había interesado esta área.
Angelique no pudo evitar sonreir al ver como le ponía ojitos de perrito casi rogandole por un poco de ayuda con los deberes, y aunque no le pusiera esos ojos Angie nunca se negaría en ayudar a un amigo y menos si se tratase de Richard, casi que lo tenía en un pedestal y dudaba que pudiera bajarlo de allí. •Si quieres puedes copiar lo que llevo hecho, no tengo inconveniente con que lo hagas• sonrió de lado al ver como su rostro se tornaba más tranquilo y relajado ante la respuesta de la chica.
Con su respuesta, Angie estaba más que segura que había notado el rojo de sus ojos y las pocas gotas de agua que quedaron en ellos cuando Ric había llegado de su habitación. Se acercó más a el y se refugió en sus brazos. Si bien sabia que con esto se delataría por completo, pero esta vez lo único que haría sería omitir los detalles importantes. •No te preocupes, estoy bien. Solo estoy algo nostalgica por ser nuestro ultimo año• claro que estaba nostalgica y si era su ultimo año pero esto tenia un trasfondo.
•sabes que te quiero... cierto?•
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Se quería tirar al Lago Negro, o tal vez morirse en manos de algún Slytherin que le odie (tal vez debe de haber alguno que quiera lastimarle, sobretodo siendo parte del equipo de su casa) porque lo menos que podía soportar en la vida era ver a Angelique de esa manera. Quería quitarle todas sus preocupaciones, que cualquier cosa que le haga pesar su alma desaparezca. Las maneras que quería hacerlo eran demasiado íntimas para su estado, pero si algo no podía evitar era arrullarla cuando sabía que algo la calcomía adentro.
-¿Nunca te he dicho que amo tu dedicación por Herbología? Es tu verdadera pasión, así como la mía es ser el nerd de los dragones- Trató de hacerle una broma, para animarla. Le movió una hebra de cabello salvaje que se encontraba fuera de lugar para ponerla detrás de su oreja. Se veía perfecta, pero sin duda eran parte de sus tácticas para tener mayor contacto con ella -No sé que piensas hacer en el futuro, pero si no te contratan juro que mandaré un Bola de Fuego Chino para intimar a cualquiera que te moleste-Tendría sus conexiones, sus notas eran perfectas para mudarse a Rumania para un internado en una granja para criar dragones.
En definitiva quería robarle un beso en ese preciso momento, pero se detuvo para solo regalarle una sonrisa mas grande y tomó su mano para apretarla. Le debía el mundo y más- ¡Te lo agradezco Angie! En serio debo de comprarte dulces en Hogsmeade para cuando vayamos- Iba a tomar sus notas y empezar el trabajo, pero la chica sabía que algo no le gustó del todo de su respuesta. Era una verdad a medias, era demasiado decirle en aquel momento todo lo que sentía, y simplemente miró hacía abajo, directamente sus pies.
-Falta mucho para pensar en el final. Y créeme que no te vas a librar de mi tan fácilmente, no me perdonaría dejarte ir- "Porque te amo" se dijo mentalmente, el mismo rompiendo su corazón con aquel pensamiento. Abrazó a la chica cuando le abrazó, besándole la mejilla con bastante cariño- Yo te quiero igualmente. Eres entre las mejores cosas que me ha pasado en la vida, hasta tal vez le ganas a mi pequeña sobrina.
-¿Nunca te he dicho que amo tu dedicación por Herbología? Es tu verdadera pasión, así como la mía es ser el nerd de los dragones- Trató de hacerle una broma, para animarla. Le movió una hebra de cabello salvaje que se encontraba fuera de lugar para ponerla detrás de su oreja. Se veía perfecta, pero sin duda eran parte de sus tácticas para tener mayor contacto con ella -No sé que piensas hacer en el futuro, pero si no te contratan juro que mandaré un Bola de Fuego Chino para intimar a cualquiera que te moleste-Tendría sus conexiones, sus notas eran perfectas para mudarse a Rumania para un internado en una granja para criar dragones.
En definitiva quería robarle un beso en ese preciso momento, pero se detuvo para solo regalarle una sonrisa mas grande y tomó su mano para apretarla. Le debía el mundo y más- ¡Te lo agradezco Angie! En serio debo de comprarte dulces en Hogsmeade para cuando vayamos- Iba a tomar sus notas y empezar el trabajo, pero la chica sabía que algo no le gustó del todo de su respuesta. Era una verdad a medias, era demasiado decirle en aquel momento todo lo que sentía, y simplemente miró hacía abajo, directamente sus pies.
-Falta mucho para pensar en el final. Y créeme que no te vas a librar de mi tan fácilmente, no me perdonaría dejarte ir- "Porque te amo" se dijo mentalmente, el mismo rompiendo su corazón con aquel pensamiento. Abrazó a la chica cuando le abrazó, besándole la mejilla con bastante cariño- Yo te quiero igualmente. Eres entre las mejores cosas que me ha pasado en la vida, hasta tal vez le ganas a mi pequeña sobrina.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Lo último que quería en ese momento era dejar que Richard se preocupara por ella, su problema si es que se podía llamar así era algo que él no podría solucionar o no de la manera que ella quería, que ella necesitaba. Lo más probable es que al confesar todos los sentimientos que llevaba guardando desde hace algunos años y el decirle que estaba enamorada de el ocasionaría en la mayoría de los casos que la relación de los cayera en decadencia y en el peor de los casos pudiera acabarse su maravillosa amistad.
Sonrió ante todos los comentarios que le hacía Ric, si bien lo único que necesitaba para siempre estar de buen humor o para cambiar su rostro entristecido era estar junto a el y escuchar sus chistes. Siempre la hacía reír y eso era una de las cosas que más le gustaba. •Y yo amo... amo tu dedicación por los dragones• pasó en seco, casi por unos pocos segundos estaba a punto de confesarle todo, quizá con esto su alma descansaría en paz, estaría mucho más tranquila de sacar todo lo que guardaba y evitar mentirle a su mejor amigo cada vez que este le preguntaba si estaba bien o si le pasaba algo, odiaba ese sentimiento. Se maldijo por dentro y luego continúo hablando.
•Eso me gusta, que sean muchos chocolates y varitas de regaliz. Pero esta vez asegúrate que mis chocolates lleguen en los envoltorios y no terminen en tu estómago• lo miró con dulzura mientras sonreía tiernamente.
Suspiró mientras escuchaba sus palabras, la verdad no quería que se alejara y le gustaba lo que sus oídos escuchaba, no dejaría que su ultimo año acabara sin por lo menos darle un beso aunque fuera el último día de clases y el dejara de hablarle. Su abrazó era muy cálido, lo necesitaba en verdad, por lo que se refugió aun mas en ellos, no quería soltarse ni dejarlo ir, y sus labios... esperaba con ansias que se movieran aunque fueran unos pocos centímetros. •No permitiré que te alejes nunca, aunque sea lo último que haga• dijo casi en susurros para luego levantar su rostro un poco y depositar un beso en las comisuras de sus labios. Acto seguido agachó su cabeza escondiéndola en su pecho, sin decir ni una sola palabra pero de lo cual no se arrepentía en lo más mínimo.
Sonrió ante todos los comentarios que le hacía Ric, si bien lo único que necesitaba para siempre estar de buen humor o para cambiar su rostro entristecido era estar junto a el y escuchar sus chistes. Siempre la hacía reír y eso era una de las cosas que más le gustaba. •Y yo amo... amo tu dedicación por los dragones• pasó en seco, casi por unos pocos segundos estaba a punto de confesarle todo, quizá con esto su alma descansaría en paz, estaría mucho más tranquila de sacar todo lo que guardaba y evitar mentirle a su mejor amigo cada vez que este le preguntaba si estaba bien o si le pasaba algo, odiaba ese sentimiento. Se maldijo por dentro y luego continúo hablando.
•Eso me gusta, que sean muchos chocolates y varitas de regaliz. Pero esta vez asegúrate que mis chocolates lleguen en los envoltorios y no terminen en tu estómago• lo miró con dulzura mientras sonreía tiernamente.
Suspiró mientras escuchaba sus palabras, la verdad no quería que se alejara y le gustaba lo que sus oídos escuchaba, no dejaría que su ultimo año acabara sin por lo menos darle un beso aunque fuera el último día de clases y el dejara de hablarle. Su abrazó era muy cálido, lo necesitaba en verdad, por lo que se refugió aun mas en ellos, no quería soltarse ni dejarlo ir, y sus labios... esperaba con ansias que se movieran aunque fueran unos pocos centímetros. •No permitiré que te alejes nunca, aunque sea lo último que haga• dijo casi en susurros para luego levantar su rostro un poco y depositar un beso en las comisuras de sus labios. Acto seguido agachó su cabeza escondiéndola en su pecho, sin decir ni una sola palabra pero de lo cual no se arrepentía en lo más mínimo.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Sabía que el ambiente estaba algo pesado entre ellos, era mas que obvio que entre ellos dos se escondían secretos que no querían ser revelados al menos por el momento. Odiaba no saber que pasaba por la cabeza de la rubia, pero el dolor en su pecho era mayor que nada. No era sencillo mentirle en la cara de la persona que mas ama por miedo, por miedo al rechazo por podía traer simplemente decirle las cosas como son. Acarició su cabello por un momento en cierta manera le tranquilizaba aquella acción simple.
Río levemente, al parecer su comentario hizo el efecto deseado. Era mas que obvio que sus dos pasiones se daban a saber a kilómetros, sobretodo en clases. Era casi una complementación, algo que entre ellos no eran extremadamente bueno hacían lo posible para ayudar al otro. O tal vez ambos le gustaba hablar de sus pasiones sin parar, sabiendo que el otro escucharía sin problema alguno- Es mas que obvio...A poco que el Profesor Creyds debe de pensar que estoy loco- Bromeó, mientras debía de admitir que estaba mas que relajado en esa posición, como si fuera natural de ellos estar de esa manera.
-Prometo que no me comeré tus chocolates. Es mas, los guardaré en una bolsa aparte con todos tus demás dulces para que veas que cumpliré con mi promesa- No podía evitarlo, amaba los chocolates. Era, sin duda una de sus comidas favoritas (si, para el no era solo un postre, sino un estilo de vida). Pero haría lo que fuera por Angelique, como siempre.
Hizo un nuevo puchero, que tal vez su mejor amiga lo vio...No podía evitar ser un niño, uno de cinco años cuales deseaba la última escoba en el mercado- Angie~ Pero si ya lo prometí, y créeme que será difícil que no haga esa promesa realidad- Pero se quedó quieto por un momento, no era paranoico y nada pero, por un momento...No creyó lo que pasó. Pero la rubia ya había bajado la mirada, avergonzada por su acción. Hizo que subiera el rostro, plantándole el mismo beso en el mismo lugar donde se lo dejó y luego uno en su mejilla y frente.
Río levemente, al parecer su comentario hizo el efecto deseado. Era mas que obvio que sus dos pasiones se daban a saber a kilómetros, sobretodo en clases. Era casi una complementación, algo que entre ellos no eran extremadamente bueno hacían lo posible para ayudar al otro. O tal vez ambos le gustaba hablar de sus pasiones sin parar, sabiendo que el otro escucharía sin problema alguno- Es mas que obvio...A poco que el Profesor Creyds debe de pensar que estoy loco- Bromeó, mientras debía de admitir que estaba mas que relajado en esa posición, como si fuera natural de ellos estar de esa manera.
-Prometo que no me comeré tus chocolates. Es mas, los guardaré en una bolsa aparte con todos tus demás dulces para que veas que cumpliré con mi promesa- No podía evitarlo, amaba los chocolates. Era, sin duda una de sus comidas favoritas (si, para el no era solo un postre, sino un estilo de vida). Pero haría lo que fuera por Angelique, como siempre.
Hizo un nuevo puchero, que tal vez su mejor amiga lo vio...No podía evitar ser un niño, uno de cinco años cuales deseaba la última escoba en el mercado- Angie~ Pero si ya lo prometí, y créeme que será difícil que no haga esa promesa realidad- Pero se quedó quieto por un momento, no era paranoico y nada pero, por un momento...No creyó lo que pasó. Pero la rubia ya había bajado la mirada, avergonzada por su acción. Hizo que subiera el rostro, plantándole el mismo beso en el mismo lugar donde se lo dejó y luego uno en su mejilla y frente.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
Fecha de inscripción : 09/03/2016
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Quiso que ese momento dejara de ser tan incomodo y volviera a ser como una tarde cualquiera en la que se encontraban los dos sonriendo, haciendo chistes y disfrutando de su compañía. Pero en ese momento la situación era diferente, parecían dos chicos que acaban de conocerse, simplemente dos extraños en una situación nada placentera.
Le gustaba saber que a conversación podía tomar un giro diferente con solo hacer un comentario fuera de lugar como lo había sido mencionar la gran pasión del chico, le gustaba verlo sonreír, escucharlo reír. Eso era lo que mas le gustaba de Richard, y sus ojos, sus labios, en una sola palabra todo el le encantaba. Suspiró y cortó el silencio que tenia •Ahora es cuando me arrepiento de no haber tomado esa clase, podría pasar más tiempo a tu lado. Aunque bueno tampoco quiero acaparar tu tiempo• Mordió su labio arrepintiéndose de lo que acaba de decir.
Comenzó a jugar con el botón de su camisa, le hacía mucha gracia ver como se estremecía ante el contacto de la rubia, tal vez era que le gustaba sentir sus manos o simplemente era el simple hecho de que era hombre y esto era algo que les gustaba a los chicos. Angie no le puso cuidado a eso por lo que siguió con lo que estaba mientras lo escuchaba hablar •Esta bien, confío en ti... Siempre lo hago• esta vez no mentía, confiaba en Richard más que en cualquier otra persona.
Lo vio hacer un puchero cuando mencionaba los chocolates, tuvo ganas de besarle y decirle que amaba esas expresiones pero se contuvo, aun no era la ocasión, a menos que así lo decidiera Ric pero dudaba que ese día llegara. Sonrió al escuchar nuevamente su promesa. Pero en ese momento no podía creer que le devolviera el beso en el mismo lugar donde ella se lo había dado. Sintió como la temperatura subía a su rostro y probablemente un tono carmesí lo acompañaba. Tomo valor por primera vez en su corta vida, lo miro fijamente a los ojos y se levanto aun mas la cabeza para depositar un beso en sus labios, cálidos y suaves.
Le gustaba saber que a conversación podía tomar un giro diferente con solo hacer un comentario fuera de lugar como lo había sido mencionar la gran pasión del chico, le gustaba verlo sonreír, escucharlo reír. Eso era lo que mas le gustaba de Richard, y sus ojos, sus labios, en una sola palabra todo el le encantaba. Suspiró y cortó el silencio que tenia •Ahora es cuando me arrepiento de no haber tomado esa clase, podría pasar más tiempo a tu lado. Aunque bueno tampoco quiero acaparar tu tiempo• Mordió su labio arrepintiéndose de lo que acaba de decir.
Comenzó a jugar con el botón de su camisa, le hacía mucha gracia ver como se estremecía ante el contacto de la rubia, tal vez era que le gustaba sentir sus manos o simplemente era el simple hecho de que era hombre y esto era algo que les gustaba a los chicos. Angie no le puso cuidado a eso por lo que siguió con lo que estaba mientras lo escuchaba hablar •Esta bien, confío en ti... Siempre lo hago• esta vez no mentía, confiaba en Richard más que en cualquier otra persona.
Lo vio hacer un puchero cuando mencionaba los chocolates, tuvo ganas de besarle y decirle que amaba esas expresiones pero se contuvo, aun no era la ocasión, a menos que así lo decidiera Ric pero dudaba que ese día llegara. Sonrió al escuchar nuevamente su promesa. Pero en ese momento no podía creer que le devolviera el beso en el mismo lugar donde ella se lo había dado. Sintió como la temperatura subía a su rostro y probablemente un tono carmesí lo acompañaba. Tomo valor por primera vez en su corta vida, lo miro fijamente a los ojos y se levanto aun mas la cabeza para depositar un beso en sus labios, cálidos y suaves.
Angelique Lowell- Mensajes : 138
Fecha de inscripción : 04/03/2016
Localización : Probablemente en donde estés Tú.
Re: Una tarde de sólo descanso? (Richard F. Livingstone)
Por un momento la sala común se sentía muy llena, mucha gente que podía lanzar sus miradas hacía ellos. En parte era claramente porque se trataba de un jugador del equipo de Quidditch, otras porque como escuchaba a veces "Angelique y Richard son poco disimulados". Muchas de las veces no entendía a que se referían, el estaba en su digno derecho de hablar con su mejor amiga/crush cuantas veces se le daba la gana, pero poco a poco realizaba el hecho que el mismo no sabía como disimular para que la rubia simplemente viese lo mismo que el, lo mucho que la amaba.
Río algo risueño, solo por el hecho que como hubieran sido sus clases al tener a la rubia cerca...Estaba mas que seguro que se la pasaría mas pendiente de mirarla y que no le pasara nada malo que en verdad escuchar las palabras del profesor Creyds. Era demasiado que el joven profesor tuviera que aguantar su fanatismo por los dragones que simplemente ignorarle por la chica que amaba- Nunca serás una molestia para mi, y lo sabes muy bien. Pero comprendo porque no lo hiciste, ya sería demasiado que me escuches hablando prácticamente 24/7 sobre dragones y eso- Al menos su clase favorita era electiva, pero a el no le molestaba para nada Herbología.
Miró sus movimientos pacientemente, en parte no se lo esperaba. Sabía que los colores se le estaba subiendo al rostro, mientras hablaban de promesas y de confianza- Gracias- Fue lo único que pudo decir en ese momento, en verdad ni en sus sueños mas salvajes se imaginó aquello. Tal vez su mente era dramática y le gustaba hacer escenas donde tal vez le diría de sus sentimientos por algo, tal vez debería de dejar que su madre le hable de sus novelas o los programas que ve en la televisión. Estaban haciendo de las suyas con el.
Pero nada le preparó para cuando por fin tuvo sus labios y simplemente se indagó después de la sorpresa inicial. Ya no le importaba que nadie los viera, esperó demasiado por aquello. Quería que su primer beso fuera tierno, demostrándole lo mucho que le quería sin decir ninguna palabra. Fue corto y simplemente se río como idiota, un idiota feliz.
Río algo risueño, solo por el hecho que como hubieran sido sus clases al tener a la rubia cerca...Estaba mas que seguro que se la pasaría mas pendiente de mirarla y que no le pasara nada malo que en verdad escuchar las palabras del profesor Creyds. Era demasiado que el joven profesor tuviera que aguantar su fanatismo por los dragones que simplemente ignorarle por la chica que amaba- Nunca serás una molestia para mi, y lo sabes muy bien. Pero comprendo porque no lo hiciste, ya sería demasiado que me escuches hablando prácticamente 24/7 sobre dragones y eso- Al menos su clase favorita era electiva, pero a el no le molestaba para nada Herbología.
Miró sus movimientos pacientemente, en parte no se lo esperaba. Sabía que los colores se le estaba subiendo al rostro, mientras hablaban de promesas y de confianza- Gracias- Fue lo único que pudo decir en ese momento, en verdad ni en sus sueños mas salvajes se imaginó aquello. Tal vez su mente era dramática y le gustaba hacer escenas donde tal vez le diría de sus sentimientos por algo, tal vez debería de dejar que su madre le hable de sus novelas o los programas que ve en la televisión. Estaban haciendo de las suyas con el.
Pero nada le preparó para cuando por fin tuvo sus labios y simplemente se indagó después de la sorpresa inicial. Ya no le importaba que nadie los viera, esperó demasiado por aquello. Quería que su primer beso fuera tierno, demostrándole lo mucho que le quería sin decir ninguna palabra. Fue corto y simplemente se río como idiota, un idiota feliz.
Richard F. Livingstone- Mensajes : 62
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